La Reina Isabel II sabe que su vida ha sido tan trascendental como para dirigir los destinos de Inglaterra durante casi siete décadas. Por eso, siempre fue consciente de que su fallecimiento sería igual de importante y, fiel a su estilo, planeó todo a la perfección.
La monarca británica, quien ostenta el reinado más extenso en la historia del Reino Unido con 69 años al frente de la corona, fue la propia encargada de diseñar el “London Bridge”, que culminará con su funeral.

Los primeros pasos a seguir una vez que Isabel abandone el mundo será divulgar la noticia a los funcionarios principales a través de mensajes encriptados. Luego, se enterará la prensa mundial con la premisa de que en los medios de comunicación se transmita música serena antes de comunicar el deceso.
Al mismo tiempo, se deberán seguir los protocolos tradicionales con la utilización de brazaletes negros y el lazo de luto en cada pantalla. No obstante, un lacayo colocará un aviso de marco negro en las puertas del Palacio de Buckingham.
La Reina Isabel II volverá a Buckigham
Cualquiera sea el lugar del deceso, la orden es que el cuerpo de la Reina Isabel II sea el salón del trono de Buckingham, donde permanecerá cuatro días hasta ser trasladada a Westminster Hall. Finalmente, nueve días tras su deceso, se llevará adelante su entierro. Ese día, se espera que los negocios no abran sus puertas.
Pese a que el príncipe Carlos se transformará en Rey a las 11 de la mañana del día siguiente al fallecimiento de su madre, se debe esperar un tiempo prudencial en señal de respeto hasta que tome la corona.