Cuando Meghan Markle y el príncipe Harry anunciaron su deseo de independizarse de la familia real y construir su vida en Estados Unidos, la pareja dejó de utilizar los títulos reales y militares que se habían ganado como miembros activos de la familia real.
El domingo, el duque de Sussex regresó al Reino Unido para reunirse con su familia en el funeral del duque de Edimburgo, que tendrá lugar el 17 de abril en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor, y parece que ha olvidado un protocolo que podría separarle aún más de su hermano Guillermo.
Y el hecho de que el hijo menor de la princesa Diana haya perdido su último rango militar tras la polémica entrevista con Meghan Markle y Oprah Winfrey podría impedirle asistir al funeral de su abuelo con uniforme militar, como exige la ley de uniformes británica.
El príncipe Harry, de 36 años, puede llevar sus medallas, pero no su uniforme, que es la diferencia entre su hermano mayor y el príncipe Carlos y sus tíos, el príncipe Andrés y la princesa Ana. Como en el caso del funeral de la Reina Madre en 2005, excepto en el caso de Guillermo, que en ese momento aún no se había incorporado al ejército.
En este caso, el Palacio de Buckingham tendría un problema, ya que toda la atención podría recaer en Harry debido al protocolo. La familia real se centraría en evitar dos escenarios probables, el primero de los cuales es que el duque de Sussex, por cualquier motivo, desvíe la atención del funeral de su abuelo.
La segunda es que este es el primer evento con su familia desde la entrevista con Oprah, y este homenaje de estilo militar ayudará a dejar claro públicamente que ahora es inferior en términos de títulos y honores a los ojos de otros reyes y del mundo. También puede separar a Harry de su familia, en este caso William y Charles. Por si esto no fuera lo suficientemente complicado, si Harry obedeciera la ley y asistiera al funeral de su abuelo vestido de civil, no se le permitiría presentar sus respetos militares ante el féretro del duque de Edimburgo. Todo esto hace que la situación puede ser realmente tensa
A pesar del panorama menos alentador, la propia Ley de 1984 establece que «ninguna persona que no sirva en las Fuerzas Armadas de Su Majestad podrá llevar el uniforme de las Fuerzas Armadas sin el permiso de Su Majestad». Por lo tanto, la Reina Isabel II es la única que podría resolver este hecho con su nieto. ¿Qué terminará ocurriendo en el funeral del Duque de Edimburgo?
